Habeis oido alguna vez aquel dicho que dice 'El que dia pasa, año empuja' ? Pues aplícate el cuento macho!!
Comienza el cuarto día de camino. Después de dormir las cosas siempre se ven de otra manera y aún más después de haber almorzado y cenado bien y haber descansado. De manera que cojo la mochila y ale! Vamos a Aiguafreda!

No se ve, pero pone: 'Para hacer realidad tus sueños has de vivir cada momento'
Al principio empiezo con un ritmo muy suave y andando como un pato por miedo a pisar con toda la plante del pié. Poco a poco y milagrosamente todos los males desaparecen. El camino también ayuda ya que es muy bonito y me distrae bastante. Más adelante llego a una zona quemada y el paisaje cambia radicalmente. A pesar de todo me encuentro muy bien y aunque tengo algo de dolor en los pies la verdad es que los esparadrapos funcionan!. Durante el camino pienso que si llego a Banyoles tendré que comprarle un regalo a la chica de la farmacia :)

Que camino mas guapo!

Así seguro que no me pierdo!

Llegando a S. Miquel

Aquí está!!

Desde la cara norte
sobre las 10 de la mañana llego a Sant Miquel del Fai y empiezo a subir la vertiente norte. Toda la montaña está quemada y los márgenes del camino están llemos de plantas con espinas. Las piernas lo pasan fatal.
A medida que el sol asciende, el calor aumenta y no hay nada de sombra. Mucho rato más tarde llego a un lugar que no está quemado y allí me tomo un descanso. Entonces veo como debía ser antes todo aquello y la verdad es que me pongo triste.

Tronkitos a mi??
A partir de aquí el camino es una pista forestal y tampoco hay sombra. Al final llego a un acantilado desde donde se ve Aiguafreda. Esto me da moral y empiezo a bajar por el camino que me lleva hasta el pie del macizo. El camí es bastante peligroso y en tres o cuatro ocasiones estoy a punto de caer.
Estoy extenuado y apenas tengo aliento para andar. Cada 10 pasos me detengo... al final llego a una casa donde aparece una mujer muy amable que me ofrece agua y me indica el camino. Me comente que el dia anterios había pasado un señor que tampién iba hacia Girona.
Después de beber y descansar siguo el camino y finámente llego a Aiguafreda (con más pena que gloria) sobre las cuatro y media.
Otra vez la rutina diaria de buscar alojamiento, ducha, curas, cena y cama. En principio lo peor ya ha pasado.
La jornada de mañana será tan solo de 14 km, aunque llevo un dia de retraso.

Tierra a la vistaaa!!